Del 16 al 19, los planteles adultos albicelestes jugarán por las medallas en la arena de La Florida, Rosario, en el marco de los IV Juegos Sudamericanos de Playa.
Tanto desde el juego vistoso y la hazaña deportiva como en lo que respecta al contagio del público, Argentina buscará emular en Rosario lo que produjo con ambos planteles en los Juegos Olímpicos de la Juventud Buenos Aires 2018, en octubre del año pasado. En aquella ocasión, las juveniles se quedaron con la medalla de oro y los varones sub 18 se colgaron la de bronce.
Parte de los nombres que adquirieron suma notoriedad en los espectadores y surfearon una ola mediática sin precedentes para nuestro deporte tras los éxitos de Parque Sarmiento estarán presentes en esta cuarta edición de los Juegos Sudamericanos de Playa, que irán televisados por TyC Sports. La salvedad es que ahora se trata de una competencia de la categoría mayor, a la que estos promisorios atletas aún se deben adaptar.
En comparación con Buenos Aires 2018, el plantel femenino repite los nombres de la pivote y goleadora Gisella Bonomi —quien además portará hoy jueves la bandera de la delegación argentina en la ceremonia inaugural de Rosario 2019—, Caterina Benedetti —capitana juvenil—, Carolina Ponce, Zoe Turnes y Fiorella Corimberto. Por el lado de los varones, competirán tres medallistas olímpicos: Francisco Daudinot, Nahuel Baptista y Elián Goux.
La preparación del ambos planteles fue muy exigente durante el verano, e incluyó competencia en torneos como el Summer Tour de la Confederación Argentina de Handball y eventos en distintas provincias como Neuquén y Río Negro, además de los Juegos Argentinos de Playa —que tuvieron lugar a principios de este mes en Puerto Madryn—. Eso generó un nivel de actividad interesante, al margen de la puesta a punto física, los trabajos técnicos y tácticos que llevaron a cabo en la pista y la arena del CeNARD.
«Esperamos producir una fusión positiva»
Ahora el primer desafío pasa por acoplar a los ex integrantes del plantel juvenil a los elencos senior, sobre todo en el caso femenino, en el que la mitad de las atletas surgieron del proyecto de los Juegos Olímpicos. En ese aspecto, Salvador Comparone, entrenador del equipo de damas, trabaja en conjunto con la directora técnica medallista de oro Leticia Brunati. Leticia es desde hace tiempo su asistente, pero no estará presente en Rosario a causa de una lesión.
«Fueron convocadas todas las jugadoras, incluso las que no habían quedado en la lista final de los Juegos Olímpicos —indicó Comparone—. La idea es armar un grupo solo, en el que todas se acoplen, que sea homogéneo y jueguen a lo mismo para que vayan rotando en los torneos oficiales y adquieran experiencia en esta nueva etapa que comienza. De esa manera podamos elegir en cada caso a las que lleguen en mejores condiciones».
«Somos conscientes de que vienen de un logro que es único y no sabemos si se va a volver a repetir. Ocurrió hace poco tiempo y no podemos dejarlo de lado, pero necesitamos que ellas sumen su experiencia a las mayores y que se enfoquen en lo que viene», resaltó «el Tano». Del 22 al 26 de mayo, disputarán en Puerto Viejo, Costa Rica, el torneo clasificatorio a los Juegos Mundiales que tendrán lugar en octubre en San Diego, Estados Unidos. La competencia es de vital importancia porque, si bien resta la confirmación oficial, entregaría a su vez plazas para el Mundial de Italia del año próximo.
Para Comparone, «el objetivo es estar en la final de Rosario, sumar una medalla. Esperemos que el público nos apoye como en Buenos Aires 2018. Y también ir aceitando el juego en este mix entre juveniles y mayores».
Caterina Benedetti, quien fuera capitana del equipo ganador del oro olímpico, espera que a partir de esa combinación puedan «producir una fusión positiva» y declaró que su expectativa es que «el aliento de la gente siga siendo el mismo que en los Juegos, si bien se van a encontrar con un grupo completamente nuevo».
De cara al futuro, señaló que «a lo que apuntamos todas es a clasificar a los Juegos Mundiales» y no dejó de resaltar que su sueño es «que más adelante el beach mayor pueda llegar a ser olímpico».
La pivote de 32 años Celeste Meccia es la estandarte de la mitad más experimentada del elenco femenino. «Chalín» fue de lo más destacado de Argentina en los World Games Wroclaw 2017, en Polonia, en los que nuestro país consiguió el máximo logro en mayores a lo largo de su historia.
Aquella medalla de plata y las dos de bronce en los Mundiales Juveniles Mauricio 2017 —obtenidas con una semana de diferencia— posicionaron a nuestra nación dentro de la élite internacional, hecho que se ratificó de manera contundente con las medallas en los Juegos Olímpicos de la Juventud el año pasado.
«Aspiramos a conseguir la ansiada medalla de oro en nuestra casa»
Rodrigo Cleppe, director técnico del equipo masculino, subrayó que «la idea es incorporar pronto a la mayoría de los chicos de Buenos Aires 2018. Ellos vienen con mucho roce y tienen muchos años de jugar a esta modalidad. Algunos, ya sea por su personalidad, contextura física o mentalidad se adaptan más rápido y a otros les cuesta un poquito más. La idea es empezar a sumar a los demás para los próximos torneos».
«Los juveniles hicieron un gran papel pero jugaban con chicos de su edad. Acá hay un cambio importante —destacó Cleppe—. Habrá atletas mucho más grandes en talla, físicamente más armados y muy capaces técnicamente. Por eso queremos llevarlos de a poco para que la adaptación sea exitosa y que no tengamos inconvenientes».
Para el head coach, «el objetivo para Rosario 2019 es claro. De mínima queremos subirnos al podio, pero aspiramos a lo máximo que es conseguir la ansiada medalla de oro en nuestra casa. Nos preparamos para eso en todos los aspectos».
¿Se agregará el oro de los Juegos Sudamericanos a la colección?
En la ciudad portuaria de Rosario, Argentina irá en busca de su primera medalla de oro en beach handball en la historia de estos Juegos, que se comenzaron a disputar en 2009 en Montevideo.
Las chicas cuentan con dos preseas de plata en sus vitrinas: Manta 2011 y Vargas 2014. Los varones alcanzaron el segundo puesto en Ecuador, mientras que en Venezuela se quedaron con el bronce. ¿Podrán en casa alcanzar el logro que les falta?
Por Santiago Menichelli – Prensa CAH
Fotos: IHF
