Image default

Celeste Meccia y Gustavo Olivero anunciaron sus retiros de las Selecciones de Beach Handball

Los World Games de Birmingham significaron el cierre de sus exitosas carreras que los vinculó con la modalidad, en el caso de Meccia durante 14 años y Olivero a lo largo de 8 años. Ambos jugadores se despiden de la arena dejando un legado fundamental para las próximas generaciones.

La histórica participación en los World Games, la primera con presencia de ambas ramas, también quedará en el recuerdo del Beach Handball argentino por ser el último torneo en la carrera de Celeste Meccia y Gustavo Olivero, dos referentes de la modalidad y de las Selecciones nacionales. La pivot y baluarte defensivo lo hará después de 14 años y el especialista tras 8 años.

«Creo que ya di todo, no me guardé nada, estoy contenta y feliz y tranquila. Se me venía haciendo difícil encarar las preparaciones, uno elige hacer un deporte en equipo y a mi me tocaba mucho tiempo entrenar sola y eso el último tiempo se me hizo muy pesado, sumado a la lesión de rodilla que me hizo el doble de esfuerzo», afirma la jugadora de las Kamikazes que debutó en el Panamericano de Montevideo 2008 y que desde entonces solo se perdió un torneo oficial con la Selección, los Odesur Manta 2011 por una fractura en la mano.

Este año pudo jugar con lo justo el Sur-Centro, en el cual Argentina se colgó la dorada por primera vez en su historia en este tipo de torneos tras vencer al local Brasil, luego de sufrir la rotura de ligamentos cruzados y una larga recuperación que le deparó más de 1 año debido a un atípico síndrome (Sudeck) en la rodilla operada. «Siempre digo que los jugadores tienen una fecha de vencimiento, era el momento justo, me voy bien y creo que también ya hay muchas jugadoras, un gran recambio y darle un espacio a ellas que se que lo van a hacer mejor, esto necesita seguir creciendo»

Aquella medalla conseguida a principio de año en Maringá, sumada a la de los Odesur Rosario 2019 -también con victoria ante el super poderoso Brasil en la final-, las dos preseas obtenidas en los World Games (plata en Wroclaw 2017 y bronce en Birmingham 2022) y la medalla plateada alcanzada en los Odesur Vargas 2014 representan los resultados más destacados en los que Meccia fue protagonista.

«Representar a la Selección es todo lo que un deportista aspira y que quiere llegar lejos. Para mi fue todo un privilegio y gran responsabilidad, estoy agradecida que lo pude hacer acompañada de grandes entrenadoras, no solo compañeras y amigas, estoy feliz de haber pertenecido y pertenecer de ese grupo de gente que pasó por la Selección o que sigue estando», dice Meccia que en el 2018 fue destacada por la IHF como una de las veinte mejores jugadoras del mundo de la modalidad.

Junto a la Selección, también fue parte de los tres Mundiales en los que Argentina participó en su historia (Recife 2014, Budapest 2016 y Creta 2022) y los Juegos Mundiales de Playa Doha 2019. Si hay una jugadora que tiene en claro el crecimiento del Beach en los últimos años, esa es «Chalin», como la conocen en la arena.

«Se ve mucho más pronunciado desde el 2019 cuando la camada que jugó los Juegos Olímpicos de la Juventud se fue sumando a los entrenamientos con las mayores. Más allá que el grupo nunca dejó de entrenar desde el 2008 y siempre tuvo objetivos claros para ir creciendo, desde ese momento y sumado a la aparición de la cancha en el CeNARD, fue el puntapié inicial».

Meccia reconoce que la difusión que significó ese mega evento en nuestro país fue determinante: «sirvió para dar a conocer el deporte y que más gente lo practique. Hay formación y cada vez hay mucho más nivel, eso me pone muy feliz desde mi lugar de jugadora que hace 14 años practica este deporte. Verlo crecer me genera un gran orgullo, aún se puede mejorar, pero este es el camino»

Por su parte, Olivero, que concretó su primera aparición en la Selección en los Odesur Vargas 2014 con una histórica medalla de bronce para el Beach Handball masculino, también se refirió a una cuestión generacional como motivo de su decisión: «Ya la venía pensando hace tiempo por varios motivos. En primer lugar los chicos que están entrenando ahora son muy jóvenes y están con un excelente nivel y claramente se está dando un recambio positivo».

Y una lesión también contribuyó con la causa. «En octubre del año pasado empecé a estar mal por una hernia de disco que prácticamente no permitía moverme y por ende no podía entrenar, entonces decidí hacerme un bloqueo, pero no resulto y tuve que operarme. Ahí ya no sabia si iba a volver a las canchas, pero por suerte tuve una buena recuperación y volví a entrenar. Obviamente luego de la operación había perdido mucho tiempo de entrenamiento pero no quería que la lesión me retire, lo quería hacer entrenando y bueno en este caso por suerte lo pude hacer participando de un torneo».

Pese a no poder meterse en la lucha por las medallas en los últimos World Games, la primera aparición de la Selección Masculina en este tipo de torneos, Olivero lo destaca como un certamen que marcará un antes y un después. «La medalla de los Odesur del 2014, el Mundial de Recife -en donde le sacamos sets a Croacia, Qatar y Rusia- y el bronce en el Sur-Centro Marica 2019 fueron resultados importantes, pero estos World Games fueron superadores», dice el jugador de 36 años en referencia a un campeonato que contó con la destacada victoria ante Croacia (la primera ante un europeo), que venía de ser campeón Mundial y que a la postre también se quedaría con la dorada en Birmingham.

«Los últimos años los viví muy contento, la verdad que el deporte tuvo un gran crecimiento y no solo a nivel mayor sino que también en juveniles. No creo que estemos un escalón debajo de las chicas, ellas el recambio generacional lo tuvieron hace unos años entonces tuvieron más aceitado el tema de formar un equipo nuevo. Nosotros recién lo estamos comenzando ahora, pero no me cabe duda que en poco tiempo estos chicos van a lograr cosas importantes».

«Tanto mis compañeros como Seba intentaron convencerme y les agradezco enormemente por los gestos que tuvieron conmigo, pero la decisión ya la tenía tomada hace tiempo. Cuando lo comunique fue un momento muy emotivo, pude abrazarme con todo el plantel que me dio una gran muestra de cariño, me agradecieron por lo hecho a lo largo de estos años. Voy a extrañar mucho el ir a entrenar con los chicos, porque además de estar representando a la argentina pasamos momentos muy lindos con el plantel», cuenta Olivero que junto a la Selección disputó los Mundiales de Recife 2014 y Kazan 2018.

«Todo deportista desde chiquito sueña con representar al país y yo tuve la suerte de hacerlo durante bastante tiempo, además disfrutar de distintos torneos con amigos. La Selección fue una responsabilidad muy grande porque estar no es nada fácil. Se tienen que dejar muchas cosas de lado, a veces entrenar con mucho frío, lluvia o mucho calor, son factores difíciles».

Meccia tampoco fue ajena a recibir un último intento para postergar el retiro: «Las chicas intentan convencerme, el Tano me dice que tengo la puerta abierta, pero la decisión está tomada, yo estoy muy tranquila, no tengo dudas, ya lo venía analizando y masticando, me quieren convencer con Santa Marta, con Bali, pero no hay vuelta atrás, estoy feliz con mi decisión».

De todas formas, para la jugadora de 36 años su relación con el Beach no terminó ya que seguirá compitiendo en la arena a nivel clubes. «Es de las las cosas más importantes de mi vida. Todo ronda alrededor de la modalidad, las decisiones, los viajes. Siempre dije que amaba mucho más el Beach que el indoor, si lo tuviera todo el año no tendría dudas que el indoor hubiera pasado a un segundo plano», se sincera Meccia que viene de conseguir el subcampeonato en el Campeonato de España (también lo había conseguido en el 2018), siendo elegida la mejor defensora, y que también ostenta en su recorrido como embajadora del beach argentino por el mundo las finales del circuito brasilero en 2015.

Pero eso no es todo, porque la jugadora que hace muchos años vive en Europa y que en paralelo al Beach lo hizo en el indoor en el handball italiano y francés no cierra la puerta a seguir vinculado con la celeste y blanca pero esta vez fuera del fleje. «Lo que más quiero es estar relacionada con el deporte y acompañando a una Selección Argentina. La cuenta pendiente es que el Beach sea olímpico, por ahora no depende de nosotras, pero sin dudas es un sueño si en un futuro me toca estar acompañando. Espero que sea en el 2028, pero se que en algún momento se va a dar».

El guiño a una Meccia entrenadora está dado, y con objetivos claros. «También me voy con cuenta pendiente ganar una medalla Mundial, se va a trabajar por eso y el nivel está. Nos falta pequeños detalles para conseguir esos resultados». En contrapartida, Olivero ve lejano seguir un camino de entrenador, pero si tiene claro que los Juegos Olímpicos sería lo máximo: «Obviamente si puedo ayudar al deporte desde otro lado mi respuesta será que sí. Ser olímpico es algo que todo jugador relacionado a la modalidad lo tiene en la cabeza, capaz en el corto plazo no se de pero no tengo dudas que a la larga el Beach llegará». Cuando ese momento llegue, los nombres de Meccia y Olivero sin lugar a dudas serán recordados por aportar los primeros cimientos de ese camino.

Por Rodrigo Alzugaray – Prensa CAH