La Confederación Argentina de Handball lamenta profundamente el fallecimiento de Walter Arzola, una de las personalidades con mayor historia en nuestro deporte y ex jugador y entrenador de la Selección Argentina.
Parte del equipo de CEF N° 13, que -ya como INEF Manuel Belgrano- ganó los Metropolitanos de 1992 y 1993, Arzola vistió la camiseta de la Selección Adulta Masculina entre 1991 y 1995. Con ella, disputó 50 partidos y participó en los Juegos Panamericanos de La Habana 1991, el Mundial B de Austria 1992, el Panamericano de Santa María (BRA) 1994 y los Juegos Panamericanos de Mar del Plata 1995 (el handball se jugó en Villa Ballester), entre otros eventos. Semejante carrera le valió nada menos que dos premios Olimpia de Plata, en 1991 y 1992.
El «Gordo», como todos le decían, también brilló como entrenador. Estuvo al frente de la Selección Adulta Femenina en 32 partidos, logrando 13 victorias, 2 empates y 17 derrotas. El punto más alto fue el tercer puesto obtenido en el Panamericano de Buenos Aires 1998, donde no solo logró no perder por primera vez en la historia ante Cuba (fue empate en 20), sino que consiguió la primera clasificación histórica a un Mundial. Tras encabezar al equipo femenino de Argentina en los Juegos Panamericanos de Winnipeg 1999, dirigió a la Selección en el Mundial de Noruega y Dinamarca 1999.
Querido por todos, Walter Arzola dejó una huella imborrable en quienes lo conocieron y quienes compartieron equipo con él. En el encuentro de este viernes entre Argentina y Chile en el Centro y Sur de Maringá habrá un minuto de silencio en su memoria y el equipo nacional llevará una banda negra en su brazo en homenaje a un histórico que estará siempre en nuestra memoria.
Hermoso recuerdo de Walter en @dmemhandball con @jotamrinaldi hablando sobre el Mundial B 1992. pic.twitter.com/3nbjK0NeDp
— CAH – Handball Argentina (@CAHandballARG) January 24, 2020
