A horas del debut en el Torneo Internacional de España, que será a las 17hs de nuestro país ante las locales con transmisión de TyC Sports en vivo, Giuliana Gavilán cuenta como está viviendo la responsabilidad de reemplazar a Antonela Mena y Rocío Campigli en un puesto determinante para la Selección.
Hace exactamente un año le tocaba reemplazar a Rocío Campigli, desafectada a último momento por una lesión, en la lista de convocadas para el Torneo Internacional de España de la edición 2016. Su primera aparición oficial en La Garra tras una larga carrera en Selecciónes Juveniles y Juniors. Un año más tarde, las lesiones de Antonela Mena en el Panamericano de Buenos Aires y de Rocío Campigli en la víspera del Mundial le permitió a Giuliana Gavilan ganarse la confianza de Eduardo Peruchena para ser el reemplazo natural de dos piezas claves en su planteo táctico.
«Tener la posibilidad de jugar un Mundial Adulto era algo que no me podía imaginar que pueda suceder tan rápido. El año pasado estaba jugando el Mundial Junior en Rusia y ni lo pensaba, mucho menos cuando estaba en Macedonia con el Juvenil hace tres. Cuando uno se sentaba y hacía el balance post Rusia, pensaba en que uno dejaba de ser Junior, que llegaría un tiempo de parate y que a no todos le toca llegar a una mayor tan rápido. El camino a veces es más largo pero se me empezaron a abrir las puertas y ahora estoy viviendo una gran oportunidad que no puedo desaprovechar. Realmente no lo creía, todavía no caigo. Yo veía que el año iba a ser muy duro, pero no había que aflojar, había que seguir, todo se da si uno sigue entrenando. Todo esfuerzo tiene recompensa», cuenta la pivot cordobesa que se sumó a los entrenamientos con La Garra tras los Juegos Olimpicos de Río.
La jugadora de Jockey Club es parte de esa renovación que la Selección Femenina atravesó tras la histórica participación en la cita olímpica, en un puesto como es el pivot que está muy bien custodiado desde hace varios años por la capitana Mena y hace poco por Campigli. Sin embargo, las lesiones de estos dos máximos referentes le significó recibir el legado a la jóven jugadora de 21 años. «Es una responsabilidad muy grande pero que la llevo con tranquilidad por el apoyo que recibo día a día tanto de mis compañeras, principalmente de Antonela y Rocío, como del cuerpo técnico. Raqui confía mucho en mi, siempre me remarca que sobre todo confíe en mi, en lo que se jugar, que lo disfrute sin descuidar obviamente la responsabilidad que tengo. En este último tramo me estuvo dando otra responsabilidad que antes no la tenía, tanto en defensa como en ataque, y eso es muy importante para mi».
Esta tarde Argentina dará comienzo su participación en el Torneo Internacional de España, el cuadrangular que servirá como preparación para el 23° Mundial Adulto de Alemania que se jugará del 1 al 17 de diciembre. En la jornada inaugural enfrentará a las locales, a las 17 (hora Argentina), el sábado enfrentará a Ucrania, a las 15, y el domingo cerrará ante Japón, a las 13. «En lo grupal estamos muy motivadas, muy metidas y conscientes de la importancia de poder jugar un torneo así. Seguimos puliendo detalles para llegar de la mejor forma a un Mundial que será muy duro para nosotras, siempre basado en una muy buena energía presente en todo el equipo. En lo personal sumando desde donde me toca, todo esto es muy especial para mi».
«Más allá que por nombres todos tienen más peso que Argentina, nosotras tenemos claro que siempre hay una posibilidad por más mínima que sea. No nos tenemos que guardar nada y estar atentas a que tu rival a priori superior puede tener un mal día, nosotras uno muy bueno, equivocarnos menos y que todo eso te lleve a dar una sorpresa», analiza Gavilán sobre lo que llegará después en Alemania en un Grupo B que tendrá a República Checa, Noruega, Hungría, Suecia y Polonia como rivales. «A las más chicas, a las que estuvimos en ese Mundial Juvenil de Macedonia muy recordado por ganarle a dos europeos, nos toca ese rol, el de contagiar y convencer a las más grandes que podemos ganarle a cualquiera».
Gavilán llegó a la Selección Femenina para seguir otro de los legados, el de las chicas del interior que llegan a vestir la camiseta nacional como lo es desde hace un tiempo la mendocina Macarena Sans y particularmente el de la cordobesa Lucía Haro, que se retiró post Juegos Olímpicos. Las dos jugadoras ocupan un lugar determinante. «Es muy importante tener al lado a alguien que vive lo mismo que vos, Maca es como una hermana para mi. Para nosotras equivale un gran esfuerzo, muchas semanas lejos de casa, entrenar acá de lunes a jueves, volver el fin de semana, jugar y volverte a ir. Es una rutina que te cansa un poco si a veces no tenes alguien en quién apoyarte. Es una elección nuestra también, pero decidimos representar a la provincia. Sin mi club yo no estaría acá donde estoy y en eso Lula Haro es una referente para mi, ver como ella pudo también estar 15 años en Selección y seguir representando a Córdoba es un gran ejemplo».
Camino a ese futuro que es parte del sueño de Gavilán y que en unas horas se pondrá en marcha con el Torneo Internacional de España y después con su primera participación en un Mundial Adulto, el recuerdo del Panamericano de Buenos Aires es imborrable para ella: «Yo tenía en claro que era la jugadora n° 18 y mientras iba pasando el torneo me daba cuenta que tal vez no me iba a tocar jugar. Pero el destino quiso que todo cambie. Entrar en una final contra Brasil, hacer dos goles, ver el estadio lleno que se caía, que había gente por todo lados me hizo tomar conciencia real de lo que creció el handball en este último tiempo, me siento una privilegiada de estar acá y es por eso que soy la primera que tengo en claro que tengo que aprovechar esta chance».
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Por Rodrigo Alzugaray – Prensa CAH
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