La dupla arbitral argentina conformada por Sebastián Lenci y Julián López Grillo viene de dirigir en el Mundial Juvenil de Rusia con un rendimiento destacado. Se prestaron a una charla con la Confederación Argentina de Handball en la que repasaron su carrera, hablaron sobre lo que significa para ellos ser representantes del arbitraje argentino a nivel mundial, sus sueños y su futuro.
Lenci (37 años) y López Grillo (34) arbitraron la semifinal del Mundial Juvenil en la que Eslovenia superó 31 a 30 a Islandia. Su nivel en ese partido decisivo fue más que satisfactorio. Contaron cómo lo vivieron y al mismo tiempo esperan con ansias lo que viene: los espera su primer Mundial Adulto femenino, el de Dinamarca (del 5 al 20 de diciembre de este año), para el que están nominados.
-¿Cómo se conocieron?
–Julián: Nos conocimos jugando al handball en el club Comunicaciones, yo soy dos años y medio más chico que Seba. Éramos compañeros de club. En un momento yo empecé a jugar en una categoría más grande y empezamos a compartir entrenamientos y partidos. Nos conocimos en el Cartero, el club de mis amores.
-¿Cuántos Mundiales pitaron ya?
–Sebastián: Éste fue nuestro octavo Mundial entre juveniles y juniors. Desde Eslovaquia 2008, todos los años tuvimos alguno: Eslovaquia 2008, Egipto 2009, Corea 2010, Mar del Plata 2011, República Checa 2012, Hungría 2013, Croacia 2014 y Rusia 2015. En diciembre vamos a dirigir nuestro primer Mundial Adulto en Dinamarca.
-Ya habían tenido la posibilidad de dirigir la semifinal de un Mundial…
-S: Sí, es la segunda semifinal que dirigimos. El año pasado pitamos Corea-Alemania en Junior femenino. En Eslovaquia 2008, arbitramos la final Serbia-Rusia. Fue raro porque éramos una pareja debutante en ese momento. La diferencia entre la semifinal de este año y la del año pasado es que en esta tuvimos un muy buen nivel; en la de Croacia 2014, si bien no nos criticaron mucho, no nos sentimos tan cómodos, no la dirigimos bien.
-¿El de Rusia es en el que mejor rendimiento tuvieron?
-S: Este Mundial fue el mejor, lejos. La designación a Dinamarca nos llegó unos días antes de irnos a Rusia. Fuimos a este Mundial como una pareja importante, la única dupla que sabía con certeza que iba a Dinamarca. Nos dieron cinco partidos parejos para dirigir. Fue un Mundial en el cual se nos fue dando todo y sentimos que veníamos haciendo las cosas bien. Las devoluciones fueron muy buenas con pocos detalles para corregir. La semifinal fue espectacular. Se dio un partido 31-30, súper parejo, donde no hubo protestas del banco y no tuvimos problemas con los jugadores. Hicimos un partido muy bueno. La planilla tuvo pocas sanciones progresivas. Dirigimos bien del principio hasta el final, fuimos muy parejos.
-J: Hemos estado en torneos donde la situación fue inversa y no nos había ido nada bien y estar los últimos días no está nada bueno. La pasás un poco mal porque quedás aislado. Pero este fue muy divertido, dirigimos la semifinal y nos fue muy bien. Fue un buen torneo. Cuando terminó el partido vimos que Manfred (Prause, Jefe de Comisión Arbitral de la IHF) se bajó de su silla y se dirigió a nosotros para felicitarnos. Eso ya nos llamó la atención. Nos metimos en el vestuario muy contentos. Compartimos un momento de esos que son inolvidables con Tedy, que se metió en el vestuario. Después me fui a duchar y lo disfruté, disfruté ese momento. Son cosas de las que te deja el arbitraje y el handball que no se van a olvidar nunca. Hay que entender que un día las cosas se te dan y otro día no. Hay que tratar de tener los pies sobre la tierra e intentar hacer las cosas lo mejor posible para cumplir, ser regulares y seguir estando.
-¿En cuánto influyó haber hecho una buena preparación y cómo se entrenan?
-S: Fue al que mejor llegamos físicamente, en peso y en entrenamiento previo. Desde enero que entrenamos todos los días. Yo hago Crossfit todas las mañanas y tres noches a la semana hago un trabajo de pista aeróbico. Se notó muchísimo el entrenamiento previo: no tuvimos dolores en todo el torneo y tuvimos mucho aire en todos los encuentros. Vamos a seguir de esta forma hasta Dinamarca
-J: Me entreno con una personal trainer dos o tres veces por semana y por mi cuenta salgo también con una rutina que tiene de todo un poco. Además me gusta mucho jugar al fútbol, lo hago una o dos veces por semana.
-¿Cuál es el análisis de las reglas que se están probando?
-S: Las reglas nuevas son perfectas. La del jugador lesionado es excelente: nadie se tira, nadie simula, no hay ningún problema. Con respecto a la tarjeta azul, es un simple tema burocrático. El pasivo está bueno, tener que cobrar pasivo al octavo pase está bueno porque los equipos saben más a qué jugar. La regla de los últimos 30 segundos está muy buena: nosotros la habíamos planteado en una final de Súper 4, donde Ward corta un saque de centro y nosotros habíamos dicho que si se hubiese cobrado penal se solucionaba todo. En su momento la presentamos por escrito en la IHF, ellos ya estaban trabajando en eso; no fue un invento nuestro. Es una buena regla, en Rusia no hubo un solo caso, nadie generó un penal en los últimos 30 segundos. En Brasil hubo tres casos pero en Rusia ya aprendieron. La última regla, la del séptimo jugador no nos terminó de gustar, pero tiene cosas positivas: no hay más remeras agujereadas como pasaba antes con el arquero-jugador. Lo malo es que para equipos como Argentina, Corea, Brasil o Arabia Saudita que hacen defensas muy abiertas, esto de siete jugadores, los obliga a bajar a seis metros y beneficia a los europeos, sobre todo, porque inician la jugada, lanza cualquiera, el cambio se hace rápido y se ven pocos goles de saque de centro o de arco a arco; realmente beneficia a los lanzadores por sobre los que pueden hacer marca muy afuera.
-¿Qué sueños tenían cuando empezaron y cuáles pudieron cumplir?¿cuáles tienen ahora?
-J: En la medida en que los sueños se van cumpliendo, uno va cambiando de sueños. El nuestro con Sebas, cuando empezamos, era entrar en la carrera internacional. Hace 10 años que estamos viajando por el mundo y conociendo países y continentes que jamás pensé que iba a conocer. Hubo sueños que soñaba y hubo otros que no sabía que los soñaba. Conocer culturas, gente, hacer y concebir amigos de otra manera. En lo deportivo fue ser internacionales, llegar a un Mundial, que nos feliciten, llegar a una final… El sueño por el que venimos peleando hace un tiempo es llegar a un Mundial adulto y si Dios quiere lo vamos a cumplir en Dinamarca (Mundial adulto femenino). Esto es lo máximo para nosotros.
-¿Qué significa representar al arbitraje argentino a este nivel?
-J: Estamos muy felices de representar al arbitraje argentino y queremos agradecer a muchos jefes, colegas que nos acompañan desde su posición. Como Miguel (Zaworotny) que nos llama siempre por Skype en los torneos y nos da tranquilidad, Patricia (Malik de Tchara) que nos acompaña con fuerza y trabajo, Thedy (Adjemian) que es muy frontal con nosotros y nos dice las cosas que ni nosotros nos animamos a decirnos y eso nos ayuda muchísimo a perfeccionarnos. También amigos, mi familia, mi novia que me banca mil cosas en tiempo que le dedico al handball cuando le podría dedicar a ella. Así es esta carrera del arbitraje, que pocos la entienden. La pasión que sentimos es un sueño en sí mismo. Todos peleamos por el arbitraje argentino. Queremos que a la pareja arbitral que le toque trate de hacer las cosas lo mejor posible porque eso abre la puerta para los que vienen atrás.
-¿Qué implica ser árbitro IHF?
-S: Los árbitros IHF entrenamos como los jugadores, vemos videos, estudiamos… Parecido a lo que hacen los jugadores internacionales. Muchos piensan que dirigir a nivel IHF es sólo ir a pitar y no es así. Además, desde Argentina como jugador o árbitro, salís en desventaja. No podés fallar en nada. Los europeos tienen más chapa y a nosotros estas cosas no nos puedan faltar.
-¿Cuánto tiempo más podrá contar con ustedes el arbitraje nacional?
– J: No nos imaginamos arbitrar hasta los 50 años. De alguna manera empezamos a hablar hasta cuándo pitaremos, pero hoy estamos en una situación de responsabilidad. Sentimos que tenemos que llevar el arbitraje argentino y americano lo más arriba posible para allanarle el camino a los que vienen atrás, como han hecho nuestros antecesores. Esto hace que nos miren de otra manera para las designaciones a los torneos y dentro de los torneos. Estamos muy agradecidos a la Confederación Argentina, que nos da una mano siempre que necesitamos. De alguna manera tenemos la responsabilidad de devolverle eso a la Confe desde la formación de árbitros, desde la colaboración y participación en torneos nacionales o internacionales que consideren para demostrar que en Argentina se trabaja de manera muy profesional desde lo arbitral y lo deportivo.
Prensa CAH
Foto: IHF