Los Gladiadores se impusieron a Groenlandia por 33 a 20 en el arranque del Panamericano de Canelones. El partido fue dinámico y tuvo mucho de positivo, más allá del resultado. El próximo rival será México, el miércoles a las 14.
El último cruce entre argentinos y groenlandeses había sido en 2012. Aquella vez, en ocasión del Panamericano de Almirante Brown, el festejo fue para los albicelestes, pero los dirigidos por Niels Moller ya se habían atrevido a mostrar los dientes. Por eso es que el arranque de este partido no generó sorpresa a los de Dady Gallardo, pero sí varias incomodidades.
Argentina sintió la falta de competencia en los primeros minutos. Y Groenlandia, con su libreto, se animó a discutirle el protagonismo. El equipo de América del Norte se amparó en el brazo goleador de Minik Hoegh, que comandó un ataque que tuvo pinceladas de ferocidad, en la fuerza física y anímica de Rasmus Larsen y en la habilidad de Akutaaneq Kreutzmann. Con esas tres como principales armas, se trabaron en lucha con los argentinos, dando pie a un duelo por demás disputado, en el que los sudamericanos sufrieron en defensa y no encontraron los espacios esperados en ataque.
Groenlandia le aportó roce al juego e invirtió enormes sumas de energía para mantenerse a tiro en el marcador, pero dependió por demás de Minik.
En la segunda parte, los groenlandeses no pudieron mantener la intensidad. Al mismo tiempo, Argentina recordó las asociaciones de juego de siempre y alcanzó su eje con el correr de las acciones. Mejoró en la circulación del balón, encontró huecos y a su vez consiguió neutralizar a sus rivales, sacando una ventaja considerable que hubiese sido impensada en la primera parte. En el goleo argentino se destacaron Federico Pizarro –con 6 tantos-, Federico Fernández –con 5-, y Damián Migueles –con 4-, pero otros 10 jugadores del equipo lograron convertir, demostrando que hay un buen recambio. Esto lo destacó el mismo Dady Gallardo: “Fueron muchos los que anotaron porque tenemos un equipo largo”. Los recursos utilizados en ataque fueron variados: hubo contragolpes, conversiones desde los laterales, tiros frontales y hasta lanzamientos bajo cadera.
Durante la parte final del cotejo, la defensa de Groenlandia se distanció enormemente de aquella que había hecho transpirar a los Gladiadores en el inicio. Y el ataque quedó estéril ante las fortalezas de la barrera defensiva albiceleste. Así, encontrándose consigo misma, la Selección Argentina venció a sus pares norteamericanos con una suficiencia esperanzadora y superó un primer tiempo en el que no pudo desarrollar su juego. “Se notó al principio que nos faltaba ritmo de competencia, pero después nos fuimos soltando”, expresó el entrenador al término del 33 a 20 con el que los argentinos obtuvieron sus primeras dos unidades en este Panamericano de Canelones 2014.
Formación inicial: Matías Schulz, Federico Pizarro, Federico Vieyra, Sebastián Simonet, Diego Simonet, Federico Fernández, Sergio Crevatin.
Goleadores: Federico Pizarro (6), Federico Fernández (5), Damián Migueles (4), Diego Simonet (3), Federico Vieyra (3), Pablo Simonet (3), Leonardo Querin (2), Adrián Portela (2), Sebastián Simonet (1),Gonzalo Carou (1), Sergio Crevatin (1), Juan Pablo Fernández (1) y Facundo Cangiani (1).
Por Santiago Menichelli – Prensa CAH