Las dirigidas por Daniel Zeballos le ganaron a Chile por 27-11 y dieron un paso importante en vista a Santo Domingo. Mañana frente a Uruguay buscarán asegurarse la clasificación.
Frente a Venezuela las chicas argentinas demostraron ser el único candidato que puede aspirar a peleare el título a Brasil, hoy lo confirmaron frente a las chilenas. Diferente el desarrollo entre un partido y otro, ayer la selección fue de mayor a menor, esta tarde fue construyendo de a poco la victoria. El desenlace, sin embargo, fue el mismo: triunfo holgado y sin sobresaltos.
No se sacaron diferencias en el inicio, en esa lucha entre ataque y defensa (ambas 6-0) la marca fue la protagonista. Argentina en ese aspecto fue mejor, Luciana Mendoza pudo superar los brazos de su marca para romper el 0-0 tras cuatro minutos de juego. A partir de ese momento la selección empezó a recurrir al juego que mejor le sale: línea defensiva bien cerrada y predominio de salidas rápidas con sus dos extremos en cancha, Luciana Salvado y Antonella Gambino.
«Pase, pase» y «sin bajar los brazos», el constante pedido de Zeballos para sus dirigidas que cumplían y sacaban, promediando el primer tiempo, una diferencia de seis goles (7-1). La respuesta de Chile fue adelantar la defensa y en ese cambio obtuvo algunos resultados, como frente a Venezuela las argentinas cayeron en la desesperación sumando varias pérdidas. Solo fue cuestión de minutos, Vico (4 goles) fue imparable jugándose la individual, siguió sumando sin oposición y lo que parecía ser una reacción chilena terminó siendo un 15-5 sin sobresaltos para Argentina al cierre de los primeros treinta.
El parcial de 5-0 en el comienzo de la segunda parte fue definitorio para las aspiraciones de las dirigidas por Ignacio Aniz, Argentina paso a defender con un 5:1 multiplicando los errores de manejo y anulando la única fórmula (cruces con sus laterales) que tenía Chile para vulnerar la defensa albiceleste. Primero Valeria Bianchi, después Noelia Sala fueron las encargadas de cumplir la función de avanzada constantemente ordenada por Zeballos.
El banco chileno pura resignación, dos goles en dieciocho minutos describían por si solo el pasaje negativo que atravesaba el conjunto trasandino y en contraste, la áspera defensa argentina reforzada siempre por la buena actuación de Silvina Schlesinger en el arco. El último parcial de 4-4, único momento que Chile pudo mantener el gol a gol, solamente sirvió para poner cifras definitivas en el resultado. Fue 27-11 a favor de la selección argentina que con la victoria lidera el grupo junto a Brasil y que de ganar mañana frente a Uruguay conseguirá el primer objetivo: obtener una plaza en el Panamericano.
Por Rodrigo Alzugaray