Los brasileños derrotaron al elenco trasandino por 35-33, en la segunda semifinal del Panamericano de Buenos Aires, de esta manera, jugarán la final, mañana a partir de las 11 (hora Argentina), contra la Selección «Albiceleste». Mientras tanto, Chile, buscará el último cupo que lo deposite en España 2013, cuando enfrente al equipo «Charrúa» por el tercer puesto.
No fue un trámite para Brasil, sino todo lo contrario. Tuvo que sudar más de la cuenta para llevarse la victoria, contra un equipo chileno que le planteó una dura batalla desde el comienzo hasta el final.
El primer parcial comenzó con un nivel de juego muy parejo entre ambos. El portero brasileño, Luis Nascimento, se lució en los primeros instantes con atajadas sensacionales, que evitaron la caída de su valla en más de una oportunidad. La paridad se reflejó también en el tanteador, que a los 10 minutos, marcaba tan solo un 5-5. Ninguno de los dos pudo tomar la iniciativa , ya que se dividieron continuamente la posesión del balón haciendo un encuentro de constante ida y vuelta. Los dirigidos por Capurro mantuvieron el buen rendimiento durante toda la primera etapa, sin embargo, en el ocaso de la misma, Brasil logró sacar una ventaja, que le permitió irse al descanso ganando 20-14.
La segunda mitad arrancó con la misma dinámica que la primera, sin haber un claro dominador del juego. La «Verdeamarhela» tomó por escasos minutos el control del mismo y supo sacar una considerable ventaja de 7 tantos, producto de sus ataques profundos que lograron quebrantar a la defensa chilena. Pero la historia no se definió ahí, ni mucho menos. Los cordilleranos no se resignaron en ningún momento y se acercaron peligrosamente en el resultado cuando se jugaban 15′ de la segunda etapa. Mientras tanto, el público disfrutaba segundo a segundo del nivel de juego empleado por ambos equipos y esperaba ansioso el desenlace de este gran encuentro. Llegando al final, Brasil intentó liquidar el partido pero se encontró con Renee Oliva, arquero chileno (una de las figuras) que respondió de manera brillante cada vez que le tocó intervenir. Esto hizo que la confianza en el conjunto trasandino aumentara y, aprovechando el nerviosismo del rival, se la jugara para lograr la hazaña. Prendidos a la ilusión de meterse en la final, el elenco chileno agotó todos sus cartuchos, pero no alcanzó. El cotejo concluyó 35-33 para los brasileños, que se clasificaron a la final del torneo y buscarán consagrarse campeones del Panamericano cuando se batan a duelo con la Selección Argentina, en el día de mañana.
Marco Oneto, pivot estrella de Chile, expresó con tristeza al término del encuentro: “Ya hace varios partidos a lo largo de este último año y medio que estamos teniendo opciones para hacer grandes cosas pero aún, por falta de experiencia, no terminamos de concluirlas. En partidos como estos es cuando más se hace notar eso”.
“Sentimos que nuestro trabajo, el de nosotros solos, está dando los frutos que hemos querido conseguir. Pero lo que más me interesa ahora es que nadie venga a ponerse la camiseta nuestra porque esto es sólo nuestro y de nadie más”, agregó el jugador, que esgrimió cierto dejo de bronca en sus declaraciones.
El número “6” brasilero, Henrique Teixeira, dejó su testimonio sobre lo que fue la semifinal: “Nos equivocamos en algunos contraataques y nuestra defensa no ha estado tan buena como en los últimos partidos. Tuvimos algunas chances de cerrar el partido pero el juego es así y Chile está muy bien. No desistimos del partido y creo que en definitiva fue un buen juego.” Sobre la final y el choque con los “Gladiadores” en la jornada del domingo, dijo: “Tenemos que mejorar para mañana porque sabemos que Argentina es un buen equipo en ataque, por eso hay que estar preparados para tener una buena final”.
A su turno, Renee Oliva habló tras la grna posibilidad que tuvo Chile ante Brasil: “Lamentablemente no alcanzó pero siempre hay que mirar lo positivo. Estamos creciendo de a poco, cada vez son más apretados los partidos contra Argentina y Brasil. Dimos un pequeño paso.”
En cuanto a su gran rendimiento, el arquero chileno dijo que “son 16 los que juegan” y que el hecho de pelearlo hasta el final no fue un mérito exclusivamente suyo. Con respecto al partido frente a Uruguay, el número “16” aseguró: “Hay que entrar a morir, tenemos que ganar como sea y alcanzar el objetivo de clasificar al Mundial.”
Por Emiliano Ammendolea