FECHA | PARTIDO | RESULTADO |
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10/6 | Argentina – Francia | 31:34 |
La visita de Francia a nuestro país tuvo varias lecturas. Por un lado, la deportiva; por el otro, la simbólica.
En lo deportivo se puede hablar de que Los Gladiadores dejaron bien en claro que el nivel mostrado en el último Mundial de Suecia no fue casualidad y que esta generación de jugadores tiene mucho para dar.
Con figuras ya consagradas como Diego y Sebastián Simonet y Matías Schulz, pero también con recambio de nivel: Fernando García tuvo un enorme partido en el arco nacional y le permitió a Argentina acercarse en el tanteador. Sin Maximiliano Ferro por lesión, Agustín Vidal tuvo que correrse al extremo y fue muy efectivo.
El partido arrancó muy mal para los dirigidos por Eduardo Gallardo. Desordenados en ataque y mal articulados en defensa, los pases a Cédric Sorhaindo o bien a un Nikola Karabatic devenido en segundo pivote lastimaban al conjunto nacional con muchos goles de 6 metros.
Promediando la primera etapa, Les Experts llegaron a estar 10 tantos arriba en el tanteador y el panorama pintaba mal.
Pero Argentina despertó y apareció la intensidad defensiva. Entró García y sus atajadas levantaron a su equipo para llegar al descanso 17:10 abajo.
El complemento tuvo los mejores momentos de los albicelestes. Porque el Negro García cerró el arco, la defensa controló a los lanzadores y en ataque se asoció la primera línea del Mundial Junior 2009: Diego Simonet, Juan Pablo Fernández y Federico Vieyra. Se anotó de contraataque y Argentina se puso a 2 goles con posesión para quedar a 1. Ahí se perdió un balón que terminó en gol francés y la cosa se volvió a complicar. Encima William Accambray volvió a mostrar su temible brazo para resolver situaciones complicadas para los franceses.
Los más de 5000 espectadores en el Luna Park empujaron a una Argentina que dejó todo y que terminó el encuentro perdiendo apenas por 3 con un segundo tiempo excelente.
Pasando al plano simbólico, recibir en nuestro país al mejor equipo del Mundo -bicampeón ecuménico, Campeón Olímpico y Europeo- fue algo histórico.
Y no solo fue histórico eso, sino cómo se vivió esa visita. La gente se volcó masivamente a ver el mejor handball del planeta en nuestro país y entre los dos partidos hubo más de 10 mil espectadores.
Además, Argentina dejó bien en claro que está creciendo a nivel mundial y que ya no es un equipo al que se le va a ganar fácil, sino que habrá que luchar y mucho para lograrlo.
Faltan cuatro meses para el gran objetivo: Guadalajara 2011. El nivel invita a soñar, pero no hay que dormirse y seguir trabajando para que la posibilidad de ser olímpicos se transforme en realidad. Materia prima hay.