Los varones y un gran partido, hasta el corte
Más allá de los cortes que oscurecieron un Luna Park que albergó 3000 almas ávidas de buen balonmano, con un 65% de las localidades vendidas, hubo triunfo argentino en la segunda presentación de la noche. El equipo de Dady Gallardo demostró algunos picos de alto rendimiento individual y una solidificación general en materia defensiva, en especial, con la figura indiscutible de Matías Schulz bajo los 3 palos.
El encuentro, veloz y muy parejo, tuvo a Argentina como protagonista desde el vamos, llevando la voz cantante durante casi toda la primera mitad. De hecho, el tablero fue quebrado por el team brasilero en una sola oportunidad, con el 10-11 conseguido a falta de 5 minutos, resultado que duró muy poco en la pizarra. Argentina, con un Gonzalo Carou muy activo gracias a las bellas combinaciones logradas con la primera linea y con un Matías Schulz de lujo cuidando la valla se dio el gusto de llegar al descanso con una diferencia de 2 goles (13-11).
A Brasil le costaba hacer pie y meterse en partido más allá de las sutiles maniobras del hábil Chiuffa y la velocidad de Felipe Borges, ambos complicando a Argentina desde los extremos . El aliento de la gente y el recambio constante en la primera linea propuesto por el cuerpo técnico nacional, le impedían a los conducidos por Javier García Cuesta tomarle la mano a la cosa, sin embargo a Argentina le faltaba fuerza en el ataque posicional y solo llegaba a situaciones claras, no forzadas, haciendo uso de la contra con Torres, Vidal y Kogovsek a la cabeza.
Y en los primeros 180 segundos del complemento quedarían a la luz estas falencias. Argentina no generaba y Brasil, en cambio se lo empezó a tomar más en serio. Ya sin Daniel Bonfin en cancha, un hombre que habitualmente no tiene muchos minutos, con Pacheco y Olivera muy dañinos desde los armados, los verde-amarillos igualarían el score en 13, para mantenerse a la vanguardia por casi más de 10 minutos. Si bien, la diferencia era mínima o nula, los visitantes estaban siempre una posición arriba de su adormecido oponente.
Pero una vez más llegarían las paradas de Matías Schulz. El hombre de Polvorines se cargó el equipo a hombros, dándole en el fondo la tranquilidad necesaria para concentrarse en ataque. Llegaron también los chutes de Federico Vieyra a distancia, aportándole a Argentina esa cuota de lanzamiento externo de la que adolece históricamente, los contraataques del ingresado Federico Pizarro y algunas interesantes acciones individuales de Diego Simonet (entre ellas varias asistencias) para volver a poner las cosas en su lugar.
Con el marcador en favor del equipo nacional llegarían los apagones y, tras el segundo de ellos , con el tanteador 21-18 favorable a Argentina, la cancelación definitiva del encuentro. Ahora habrá que esperar 24 horas más para ver a ambos equipos en acción, en lo que será la despedida de los seleccionados antes de su gira por Europa (que incluye Paris Bercy y mundial en Suecia a mediados de enero).
Sintesis:
Argentina – Brasil 21-18 (13-11) – Encuentro cancelado a falta de minutos para el cierre por reiterados apagones.
Argentina:
Schulz, Bar, Querín (1), Kogovsek (3), Pizarro (2), D.Simonet (1), S.Simonet (1), Vidal (2), Torres (3), Lima (1), Carou (3), Plati, Gull, Castro, Arce, Vieyra (4)
DT: Eduardo Gallardo.
Brasil:
Pacheco (3), Tupan Rui, Leo Bortolini (2/2p), Pires, Jaqson, Vasconcelos, Thiagus, Pozzer (1), Chiuffa (4), Cardozo (2), Bonfin, Vinicius (1), Oliveira (2), Borges (3).
DT: Javier García Cuesta.
Sanciones:
Argentina: S.Simonet (A), Arce (A), Carou (A), Plati (2), Querin (2), Kogovsek (2).
Brasil: Pacheco (A), Thiagus (A), Jaqson (A,2), Borges (2).
Progresión:
1°T: 1-0 / 1-1 / 2-1 / 2-2 / 3-2 / 3-3 / 4-3 / 5-3 / 5-4 / 6-4 / 7-4 / 7-5 / 7-6 / 7-7 / 8-7 / 9-7 / 9-8 / 9-9 / 10-9 / 10-10 / 10-11 / 11-11 / 12-11 / 13-11.
2°T: 13-12 / 13-13 / 13-14 / 14-14 / 14-15 / 14-16 / 15-16 / 16-16 / 17-16 / 18-16 / 18-17 / 19-17 / 19-18 / 20-18 / 21-18.
Las chicas jugaron un gran primer tiempo, pero no alcanzó
En el primer chico de la serie de dos encuentros que celebra el Desafío del Bicentenario, el seleccionado femenino conducido por Miguel Interllige no pudo con su par brasileño. Las verde-amarillas fueron mucho más en la segunda mitad y por eso se llevaron el encuentro con cierta holgura. Mientras que los resultados de la ofensiva argentina estuvieron totalmente centralizados en la figura de Luciana Mendoza, Brasil se caracterizó por un juego mucho más fluido y un goleo bien repartido.
Durante los 30 iniciales, las chicas argentinas, envalentonadas por el calor del público y aprovechando algunas deficiencias en el juego de las brasileras, se la rebuscaron para vulnerar la valla rival. Los misiles de la zurda Mendoza a distancia (6/8) fueron determinantes y por eso Argentina se encontró arriba en el marcador tras remar de atrás buena porción de ese tramo.
Gran parte de la responsabilidad del 12-11 parcial, corrió también por cuenta y orden de la arquera Valentina Kogan, sumada a los esfuerzos individuales de Valeria Bianchi. La guardavallas de Sedalo no solo detuvo pelotas importantes, sino que también estuvo certera a la hora de ejecutar salidas de contra y empujando al equipo desde atrás. La primera linea de Luján, por su lado, le dio mucha movilidad al ataque albiceleste en un encuentro que, como consecuencia de las imprecisiones, se mantenía muy equilibrado.
Sin embargo, el gigante se despertaría en el complemento. Brasil ajustó sus desperfectos en el entretiempo y salió a matar en el segundo. En cuestión de minutos la visita se adueñó del juego, usufructuando en demasía los reiterados errores de Argentina (8 pérdidas de balón en 10 minutos), que intentaba, de manera fallida, pasar la ferrea 6-0 que el técnico danés Morten Soubek había impuesto a sus pupilas.
Así fue que Argentina se cansó de chocar contra el muro amarillo una y otra vez. Más allá de los arrebatos individuales de Victoria Crivelli, los lanzamientos esperanzadores de Solange Tagliavini o las atajadas espectaculares de la ingresada Silvina Schlessinger, Brasil se fue convirtiendo en amo y señor con el correr de los minutos hasta sacar una renta máxima de 6 goles (15-21), cuando aun restaban cerca de 8 minutos por jugar en el tablero.
Mientras que la ofensiva de Interllige se secó completamente en la segunda mitad, anotando solo 6 goles en 30 minutos, la visita, sin descollar, siguió anotando al ritmo que lo venía haciendo. De la mano de las desequilibrantes Rodrigues, en especial Ana Paula (3 anotaciones), de los goles de Quintino (5 en total) y de las tapadas de Samira bajo los 3 palos, el team brasilero iba a redondear una victoria que culminaría con un amplio e inapelable 18-24.
Sintesis:
Argentina – Brasil 18-24 (12-11)
Argentina:
Schlessinger, Sala (1), Pizzo, Haro (1), Ferrea, Romero, Belotti (1), Mendoza (8), Crivelli (2), Totolo, Kogan, Roses, Bianchi (2), Sanguinetti, Salvado (1), Tagliavini (2).
Brasil:
Moreira, Diniz (1), Anastacio (1), De Andrade, Piedade (2), Souza, T. Rodrigues (2), A. Rodrigues (3), De Castro (2), D. Rocha (3), Arenhart, Quintino (5), Araujo (2), Rocha (1), Gris, De Moraes (2)
Fuente: Superhandball | Fotos: fcohandball.com.ar y tycsports.com